Cerrajeria Belvedere las 24 horas, nos encuentras en Avenida Agraciada a metros del Supermercado Devoto. Te abrimos toda clase de Autos y cerraduras de casas y empresas. Te atendemos todos los dias, sabados, domingos y FERIADOS.
Esta es la forma en que conocimos a la Cerrajeria en Belvedere. En nuestra casa en Belvedere vivimos tres personas. Cada uno tiene sus llaves; así puede entrar y salir libremente.
Las mejores llaves son las que tiene mi madre porque son las originales, las mías que soy la hija mayor también son buenas, pero las copias de mi hermano han quedado fatal.
Creemos que no funcionan muy bien por ser una copia de una copia. Y al principio pensabamos que no pudiera abrir bien la puerta de entrada a la casa a la calidad de sus copias. Sin embargo, todos comenzamos a tener problemas al abrir y cerrar la puerta. Nos pasaba sobre todo cuando hacía frío.
Es como si el metal de la puerta y de la cerradura de la puerta se destemplara con la temperatura. Así que estuvimos varias semanas viviendo a merced del clima. ¡La cerradura se pone tremenda cuando llueve o hace frío! Cuando el clima está así, los tres juegos de llave se traban. Eso nos ocurría con la puerta principal de la casa, que es, en efecto, la más importante.
Mi hermano empezó a colocarle grafito al cilindro de la puerta de entrada, para limpiarlo y lubricarlo. Esa alternativa aunque no es mala, solo sirvió para alargar unos cuantos días más la vida de la cerradura.
A veces, cuando a alguno no le abría la puerta, desde adentro de la casa otro miembro de la familia ayudaba a abrirla. Pero como suele ser en estos casos, llegó el día en el que la cerradura se trabó y no dio para más.
El final de las cerradura en Belvedere
Un buen día llegué a casa y simplemente no pude abrir la puerta. Recordé que mi hermano sugirió dejarla entreabierta.
Mamá y yo decidimos no hacerlo por temor a la inseguridad. Ese día que no pude abrir la puerta llamé a mamá y a mi hermano, pero ambos estaban fuera de casa.
Estaba lloviendo bastante, y ya saben que la cerradura se pone horrible cuando eso pasa. Como mamá y José, estaban tan lejos de casa, decidí llamar a un cerrajero. De verdad, que me harté de la situación y de los pañitos de agua tibia con los que habíamos sobrellevado el problema.
Coloqué en el buscador de mi celular cerrajero en Belvedere y en efecto salieron varios anuncios. Me dediqué a explorarlos y de hecho llamé a varios lugares, pero el que me dio más confianza fue el de Cerrajeria en Belvedere. Lo que me parecia importante es que tuvieran un cerrajero urgente para solucionar en el momento. Se trataba de un servicio de cerrajeria de urgencia.
Me gustó la atención de su central telefónica y las preguntas que me hicieron. Todos los cuestionamientos me parecieron muy lógicos. Decidí contratarlos vía telefónica y, en efecto, llegaron en poco tiempo a la casita que está en el centro sur de Montevideo.
Cerrajeria en Belvedere me brindó la solución de Urgencia
Cuando el cerrajero llegó, me confirmó lo que ya habíamos sospechado: La cerradura estaba dañada. La solución era simple: Cambiarla. Solo que no lo habíamos hecho, quizás por procastinadores. También es cierto que no habíamos confiado de las habilidades de mi hermano, quien resuelve todo en casa.
El cerrajero llevaba varios tipos de cerraduras y cilindros en su maletín, pero lo primero que hizo fue quitar la cerradura de cilindro vieja. Se lo agradecí infinitamente porque tenía buen rato esperando afuera de la casa, bajo la lluvia. Después instaló una cerraduras doble paleta tipo Star.
Hacía tiempo que queríamos tener una así, sobre todo por la seguridad que brinda. Y la verdad es que el trabajo salió menos costoso de lo que imaginábamos.
Ese día se instaló y al día siguiente, yo misma fui a la Cerrajeria en Belvedere y le saqué un juego de llaves a mi hermano. Desde entonces no hemos tenido más problemas para abrir o cerrar la puerta. Y ya no importa que llueva, truene o relampagueé. Gracias por enviarnos al cerrajero a domicilio.